Jesús les dijo: — Venid aparte conmigo. Vamos a descansar un poco en algún lugar solitario. (Marcos 6:31)

El descanso es importante. Descansar con Jesús es una necesidad. Lo triste es que vivimos en un mundo en el cual, en ocasiones, no es posible tener este tiempo de soledad y descanso con Jesús, nuestro Maestro; ese espacio que nos renueva física, mental, emocional y espiritualmente. Pero, otras veces, no queremos tener ese espacio a solas con Jesús, nos intimida, nos preocupa que nos pueda confrontar con nuestra realidad. Aún, en otras situaciones, no queremos estar a solas con nosotros mismos y tener que enfrentarnos con nosotros mismos y, por eso, precisamos llenar nuestra vida de ruido y gente.

¿Cuál es tu situación ? ¿Cómo respondes a esta invitación de Jesús?

 


Jesús les dijo: — Venid aparte conmigo. Vamos a descansar un poco en algún lugar solitario. (Marcos 6:31)

El descanso es importante. Descansar con Jesús es una necesidad. Lo triste es que vivimos en un mundo en el cual, en ocasiones, no es posible tener este tiempo de soledad y descanso con Jesús, nuestro Maestro; ese espacio que nos renueva física, mental, emocional y espiritualmente. Pero, otras veces, no queremos tener ese espacio a solas con Jesús, nos intimida, nos preocupa que nos pueda confrontar con nuestra realidad. Aún, en otras situaciones, no queremos estar a solas con nosotros mismos y tener que enfrentarnos con nosotros mismos y, por eso, precisamos llenar nuestra vida de ruido y gente.

¿Cuál es tu situación ? ¿Cómo respondes a esta invitación de Jesús?

 


Jesús les dijo: — Venid aparte conmigo. Vamos a descansar un poco en algún lugar solitario. (Marcos 6:31)

El descanso es importante. Descansar con Jesús es una necesidad. Lo triste es que vivimos en un mundo en el cual, en ocasiones, no es posible tener este tiempo de soledad y descanso con Jesús, nuestro Maestro; ese espacio que nos renueva física, mental, emocional y espiritualmente. Pero, otras veces, no queremos tener ese espacio a solas con Jesús, nos intimida, nos preocupa que nos pueda confrontar con nuestra realidad. Aún, en otras situaciones, no queremos estar a solas con nosotros mismos y tener que enfrentarnos con nosotros mismos y, por eso, precisamos llenar nuestra vida de ruido y gente.

¿Cuál es tu situación ? ¿Cómo respondes a esta invitación de Jesús?