Al ver la fe quienes lo llevaban,, Jesús dijo al enfermo: Amigo, tus pecados quedan perdonados. (Lucas 5:20)


Para mí lo más significativo de este pasaje es los amigos de aquel hombre impedido físicamente. Él, por sus propios medios, nunca hubiera tenido acceso al Maestro; necesitaba que alguien le ayudará a llegar hasta Él. Este relato nos enseña mucho acerca de cómo eran aquellos hombres que le brindaron su apoyo y de cuán importante es tener buenos amigos, amigos que nos acerquen a Jesús. 

Eran gente de fe, confiaban en el Señor y su capacidad de sanar a su amigo. Si nos fijamos bien en el pasaje, en ningún momento se indica que el enfermo tuviera fe; sin embargo si que se es explícito acerca de la fe de aquellos que le trajeron, es más, fue la fe de ellos la que según el texto fue honrada por Jesús otorgándole la sanidad al paralítico. Eran personas que tenían un amor e interés genuino por las necesidades de su amigo. Sabían dónde encontrar la solución y se movieron en aquella dirección. Finamente, eran personas dispuestas a superar cualquier obstáculo que les impidiera cumplir su objetivo ¡No hay duda de que fueron bien creativos! Me pregunto que debió de pensar el dueño de la casa.

Pienso que este pasaje tiene una aplicación simple y sencilla, ser gente que ayudemos a que otros puedan acercarse al Maestro, Ser intencionales en llevarlos a Él o, por lo menos, asegurarnos que no somos un obstáculo en el camino.


¿Quién hay en tu entorno que necesita ser acercado a Jesús? ¿Qué puedes hacer al respecto?



Al ver la fe quienes lo llevaban,, Jesús dijo al enfermo: Amigo, tus pecados quedan perdonados. (Lucas 5:20)


Para mí lo más significativo de este pasaje es los amigos de aquel hombre impedido físicamente. Él, por sus propios medios, nunca hubiera tenido acceso al Maestro; necesitaba que alguien le ayudará a llegar hasta Él. Este relato nos enseña mucho acerca de cómo eran aquellos hombres que le brindaron su apoyo y de cuán importante es tener buenos amigos, amigos que nos acerquen a Jesús. 

Eran gente de fe, confiaban en el Señor y su capacidad de sanar a su amigo. Si nos fijamos bien en el pasaje, en ningún momento se indica que el enfermo tuviera fe; sin embargo si que se es explícito acerca de la fe de aquellos que le trajeron, es más, fue la fe de ellos la que según el texto fue honrada por Jesús otorgándole la sanidad al paralítico. Eran personas que tenían un amor e interés genuino por las necesidades de su amigo. Sabían dónde encontrar la solución y se movieron en aquella dirección. Finamente, eran personas dispuestas a superar cualquier obstáculo que les impidiera cumplir su objetivo ¡No hay duda de que fueron bien creativos! Me pregunto que debió de pensar el dueño de la casa.

Pienso que este pasaje tiene una aplicación simple y sencilla, ser gente que ayudemos a que otros puedan acercarse al Maestro, Ser intencionales en llevarlos a Él o, por lo menos, asegurarnos que no somos un obstáculo en el camino.


¿Quién hay en tu entorno que necesita ser acercado a Jesús? ¿Qué puedes hacer al respecto?