RESURRECCIÓN
Muchas veces hemos escuchado en debates de televisión o a otras personas: “no sabemos que hay después de la muerte, nadie ha regresado y nos ha contado que nos vamos a encontrar …”
Pero eso no es verdad.
Jesús murió y resucitó.
Veamos los hechos …
Su muerte fue confirmada por uno de los centuriones de confianza de Pilato.
Los sacerdotes y fariseos pidieron a los romanos que apostaran su guardia porque habían oído que aquel “embaucador” había dicho que iba a resucitar y pensaban que sus discípulos podían robar el cuerpo y decir que había resucitado.
Así que, según los entendidos un grupo de 4 o más soldados quedaron custodiando la tumba, tras una gran y pesada piedra. Soldados fuertemente armados, gente de guerra que no podían permitirse ni dormirse ni errar en su cometido ya que se exponían a pena de muerte. Soldados de uno de los ejércitos más poderosos del mundo. Soldados que durante 15 siglos mantuvieron el imperio más grande del mundo.
No parece que unos discípulos temerosos y desesperanzados, y que incluso habían negado a Jesús estuviesen en condiciones de hacer un asalto al sepulcro.
Pero algo pasó que hizo que esos discípulos temerosos fuesen transformados y llegasen a ser férreos defensores de Jesús. Algo pasó para que muchos de ellos dieran su vida por su fe. Muertos a espada, apedreados, crucificados, atravesados por flechas, decapitados …
Lo que sucedió por increíble que parezca es que Jesús resucitó.
Jesús fue visto por más de 500 personas en las semanas siguientes en once situaciones diferentes.
Un antiguo juez de Inglaterra, Lord Darling dijo de la Resurrección: “A su favor como una verdad real existe una evidencia tan aplastante, positiva y negativa, objetiva y circunstancial, que ningún jurado inteligente del mundo podría errar al dar el veredicto de que la historia de la Resurrección es cierta.”
Jesús es quien dijo ser: el hijo de Dios, el único camino al padre. El dijo que tenía capacidad para perdonar nuestro pecado, ese pecado que nos separa de un Dios santo y que por su Gracia podíamos acercarnos a Dios.
Jesús es nuestra esperanza.
¡ Jesús ha resucitado verdaderamente !
