Pero yo en ti pongo mi confianza. (Salmo 55:23)


Cualquier cristiano diría amén a esta afirmación. Lo diría porque mentalmente está de acuerdo, no tiene nada en contra. Pero ¿se trata de una realidad o más bien de un deseo, una aspiración? ¿Cómo puede alguien saber si realmente confía en Dios más allá de lo puramente conceptual, intelectual, mental?

Algo que he aprendido durante estos últimos años al dar clase en contextos seculares es que las cosas hay que evidenciarlas por medio de conductas observables. No basta con afirmar que uno sabe algo o tiene un determinado valor en su vida. Si es así, deben haber indicadores observables de que no es tan solo algo a lo que la persona aspira, sino que vive en su realidad cotidiana.

Creo que esto puede ser muy desafiante a la vez que positivo para los seguidores de Jesús. Si yo afirmo que confío en el Señor ¿Cuáles son las evidencias observables en mi vida cotidiana que lo demuestran? Si proclamo que amo a Dios ¿Cuáles serían los indicadores que lo expresan en mi cotidianidad? Así podríamos seguir uno tras otro con las múltiples verdades que creemos pero que... no necesariamente vivimos. Dicho de forma más clara, si no hay conductas observables, identificables, medibles, realmente no confías en Dios, aunque te gustaría, con toda probabilidad, hacerlo.

No, no me estoy inventando nada nuevo. Jesús mismo dijo que por nuestros frutos, nuestras conductas observables, nos conocerán. Afirmó que si le amamos, intención interna, obedeceremos sus mandamientos, conducta externa. Es más, afirmó que el mundo conocería que somos sus discípulos por nuestro amor y, no lo olvidemos, en la Escritura obras son amores y no buenas razones.

¿Eres un seguidor de Jesús? ¿Qué evidencias más allá de tus hábitos dominicales lo evidencia?

 



Pero yo en ti pongo mi confianza. (Salmo 55:23)


Cualquier cristiano diría amén a esta afirmación. Lo diría porque mentalmente está de acuerdo, no tiene nada en contra. Pero ¿se trata de una realidad o más bien de un deseo, una aspiración? ¿Cómo puede alguien saber si realmente confía en Dios más allá de lo puramente conceptual, intelectual, mental?

Algo que he aprendido durante estos últimos años al dar clase en contextos seculares es que las cosas hay que evidenciarlas por medio de conductas observables. No basta con afirmar que uno sabe algo o tiene un determinado valor en su vida. Si es así, deben haber indicadores observables de que no es tan solo algo a lo que la persona aspira, sino que vive en su realidad cotidiana.

Creo que esto puede ser muy desafiante a la vez que positivo para los seguidores de Jesús. Si yo afirmo que confío en el Señor ¿Cuáles son las evidencias observables en mi vida cotidiana que lo demuestran? Si proclamo que amo a Dios ¿Cuáles serían los indicadores que lo expresan en mi cotidianidad? Así podríamos seguir uno tras otro con las múltiples verdades que creemos pero que... no necesariamente vivimos. Dicho de forma más clara, si no hay conductas observables, identificables, medibles, realmente no confías en Dios, aunque te gustaría, con toda probabilidad, hacerlo.

No, no me estoy inventando nada nuevo. Jesús mismo dijo que por nuestros frutos, nuestras conductas observables, nos conocerán. Afirmó que si le amamos, intención interna, obedeceremos sus mandamientos, conducta externa. Es más, afirmó que el mundo conocería que somos sus discípulos por nuestro amor y, no lo olvidemos, en la Escritura obras son amores y no buenas razones.

¿Eres un seguidor de Jesús? ¿Qué evidencias más allá de tus hábitos dominicales lo evidencia?

 



Pero yo en ti pongo mi confianza. (Salmo 55:23)


Cualquier cristiano diría amén a esta afirmación. Lo diría porque mentalmente está de acuerdo, no tiene nada en contra. Pero ¿se trata de una realidad o más bien de un deseo, una aspiración? ¿Cómo puede alguien saber si realmente confía en Dios más allá de lo puramente conceptual, intelectual, mental?

Algo que he aprendido durante estos últimos años al dar clase en contextos seculares es que las cosas hay que evidenciarlas por medio de conductas observables. No basta con afirmar que uno sabe algo o tiene un determinado valor en su vida. Si es así, deben haber indicadores observables de que no es tan solo algo a lo que la persona aspira, sino que vive en su realidad cotidiana.

Creo que esto puede ser muy desafiante a la vez que positivo para los seguidores de Jesús. Si yo afirmo que confío en el Señor ¿Cuáles son las evidencias observables en mi vida cotidiana que lo demuestran? Si proclamo que amo a Dios ¿Cuáles serían los indicadores que lo expresan en mi cotidianidad? Así podríamos seguir uno tras otro con las múltiples verdades que creemos pero que... no necesariamente vivimos. Dicho de forma más clara, si no hay conductas observables, identificables, medibles, realmente no confías en Dios, aunque te gustaría, con toda probabilidad, hacerlo.

No, no me estoy inventando nada nuevo. Jesús mismo dijo que por nuestros frutos, nuestras conductas observables, nos conocerán. Afirmó que si le amamos, intención interna, obedeceremos sus mandamientos, conducta externa. Es más, afirmó que el mundo conocería que somos sus discípulos por nuestro amor y, no lo olvidemos, en la Escritura obras son amores y no buenas razones.

¿Eres un seguidor de Jesús? ¿Qué evidencias más allá de tus hábitos dominicales lo evidencia?