La evidencia que hemos de buscar es, ante todo, conductas y no meramente creencias. Podemos tener las doctrinas correctas y que estas no se manifiesten en un estilo de vida caracterizado por la presencia del Señor. ¡Obras son amores y no buenas razones! afirma el refrán castellano. Por sus frutos los conoceréis y solo entra en el Reino de los Cielos el que hace la voluntad de mi Padre, indica Jesús.
Si me miro en el espejo ¿Cuánto del carácter de Jesús es visible en mí? Juan en su primera carta indica que si alguno dice que conoce a Jesús debe vivir como Él vivió. ¿Cuán evidentes son los frutos del Espíritu descritos en Gálatas en mi vida? Quien vive la vida cotidiana bajo Su influencia es lo que produce.
En definitiva ¿pasas las prueba?